"Kullín" proviene de la palabra "kulliñ" que significa animal en mapudungún. Justamente la mezcla de estos dos fundamentos intentan atrapar el espíritu de este proyecto, que pretende rescatar el valor de la fauna chilena a través de la joyería y la impresión 3D. Pretende fusionar la tecnología con la naturaleza nativa para crear pequeñas piezas de arte que puedan llevarse encima.